sábado, 15 de mayo de 2010

a veces pienso que no soy la unica.

Estoy derrotada y es una derrota peor cuando no tienes a nadie al frente para.. ¿como decirlo?
¿llorar en su hombro? .. llamé a alguien en especial, para contarle mis desgracias del día sábado, y es que un sábado en el que se te juntan las cosas, no es un sábado cualquiera; por suerte, mis dudas existenciales se resolvieron al instante con el sonido de su voz al otro lado del teléfono.
Aunque; por un momento, sentí un tono de burla,de sátira en su voz, no dudé en seguir contándole mis lamentos, uno a uno.. me sentía tan mal, que tenía ganas te tirar todo por la borda del barco de mis ilusiones construídas desde hace mucho, REALMENTE, hace mucho.
Pero, no sería la primera vez que lo haga, ni la última, porque en mi vida cada día, cada segundo, cuando creo que todo está bien y que nada puede salir mejor todo sale, PEOR.
Nunca me había sentido así, tan cálida al escuchar una palabras bonitos, que son sinceras, realmente se notan sinceras saliendo de esos labios, se que no me lamentaré luego.
pero sigo derrotada, sigo con mi bandera de tregua al aire, pensando en que quizás algunas desiciones no se debieron tomar tan rápido, pensando en si estoy haciendo lo que realmente quiero y recordé el día; no muy lejano, en el que juraba jamás dudar de lo que hacía..
sinceramente, a veces siento que nada es para mí.
Pero.. aunque pueda sonar cursi, devastadoramente cursi, locamente romántico, gracias al sonido de su voz puedo no ser yo y ser una persona mejor, solo esa voz me dice lo que es cierto, me dice ,la verdad que siempre quize escuchar, ESA VERDAD, la que jamás escuché, por la que siempre lloré, por la que nunca fuí feliz y esta felicidad extraña me hace recordar que siempre pedí alguien así... y aunque el tiempo no me de tiempo para poder demostrar todo lo que estoy sintiendo .. puedo darme ese microsegundo para decir palabras que me cuestan demostrar fácilmente, pero aprendo a ser feliz en esos milisegundos mas pequeños que una estrella a lo lejos en ese cielo escaso de ellas, pero que me sirven para aprender, cada día más, aprender algo de la persona detrás del teléfono, que me ayuda a caminar, me ayuda a soportar, me ayuda a no perderme.
Todavía no se ha terminado todo, aún puedes seguir, nada esta dicho, todas esas palabras juntas en la boca de alguien que me hace sentir fuerte valen la pena cuando uno tiene el inevitable sabor de derrota en sus labios, una noche de sábado.. una noche en la que la soledad ronda en mi vida mas que cualquier otro día de mi vida, más que cualquier otra tarde y otra noche, pero aún asi me siento tristemente acompañada

bendita la luz de tu maldita ausencia, que aunque ausencia, la siento presente, pero esa presencia no es suficiente para nutrir mi decepcionado corazón, me acostumbro, me hago la idea, pero aún así espero poder pronto gozar de un poco menos de ausencia, un poco más de presencia, creo que si has sufrido tanto como esta pobre mortal un poco de presencia tuya en mi vida no es algo que se considere mucho pedir.

No hay comentarios: